Monasterio de Santa Clara de Medina de Pomar

No hay noticias de la construcción del primer establecimiento monástico, sólo que el papa Juan XXII concedió desde Aviñón, en 1318, indulgencias a favor de los visitantes del convento y quienes colaboraran en su construcción. Se desconoce desde cuándo se instalaron las monjas. Inicialmente, se estableció que la comunidad estaría formada por 24 monjas, pero muy pronto se amplió. Los fundadores, y particularmente Sancha García se encargaron de dotar económicamente a la empresa, de forma que se pudiera garantizar el mantenimiento de la casa. En este sentido, hay constancia de que miembros de la familia Velasco fueron ingresando en el monasterio como monjas de forma regular hasta el siglo XVIII. En 1455, uno de los descendientes de los fundadores, Pedro Fernández de Velasco (1399-1470), fundó el Hospital de la Vera Cruz junto al monasterio de las clarisas.

Debido a la desamortización, en 1835 la comunidad perdió sus rentas y la propiedad de las fincas que les garantizaba su subsistencia, desde ese momento las monjas tuvieron que realizar trabajos diversos para su sustento. Otras incidencias fueron los enfrentamientos bélicos que le afectaron, desde las guerras Carlistas hasta la guerra Civil, pero éstas no fueron tan graves si las comparamos con efectos sufridos por otras comunidades religiosas. De hecho, el patrimonio y el archivo monástico se conservó. En los últimos años se han realizado importantes obras de conservación y restauración.