Los dominicos se establecieron en Arlés el 1231, la
nueva comunidad se vio beneficiada por Pierre Amantius
quien facilitó los terrenos del convento, cuya
construcción también financiaría. Aquel primer
establecimiento estaba situado extramuros de la ciudad,
lugar donde mantuvo su actividad hasta en 1360 cuando se
vio afectado por la guerra de los Cien Años que conllevó
su incendio y destrucción. Una bula papal autorizó su
traslado a un nuevo emplazamiento, en un lugar más
céntrico y cerca del Ródano. A mediados del siglo XV se
modificó de nuevo el emplazamiento, desplazándose al
este, donde construirían la iglesia que aún se conserva. |

Dominicos de Arlés |

Dominicos
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También fue en esa época que el convento se reformó en
cuanto a la observancia, tal como se venía haciendo en otras partes.
En 1448 se puso la primera piedra de la iglesia y en 1499 se
consagraba el nuevo templo. A causa de la Revolución, la comunidad
dejó el convento y los edificios fueron vendidos. Todo el conjunto
conventual sufrió los efectos de los nuevos usos dados a la casa que
se había parcelado. A pesar de todo, la iglesia, desprovista de su
mobiliario, mantuvo el grueso de sus estructuras pero no ocurrió lo
mismo con las otras dependencias conventuales. |

Dominicos de Arlés
Fotografía de Mbzt, en Wikimedia |