Este
monasterio es uno de los más importantes de los muchos
que se encuentran en la comarca, conocidos en su
conjunto como Tebaida Berciana. Fue erigido en el siglo
VII por San Fructuoso de Braga cuando éste dejó la
comunidad de Compludo para practicar el
eremitismo en un
oratorio que dedicó a San Pedro, situado en el lugar
conocido como castro Rupianense. Debido a la llegada de
muchos seguidores se fundó un cenobio (640?), que se
conocería como San Pedro de Montes. En el mismo siglo
VII, una vez Fructuoso ya había abandonado el lugar,
llegó otro personaje: Valerio del Bierzo, en su época
San Pedro de Montes debería estar formado por un
conjunto de monjes que llevarían una vida ascética en
ermitorios, y una iglesia. Después de Valerio hay una
época sin noticias del lugar, seguramente debido a la
falta de seguridad por la invasión islámica, que
acabaría con su abandono. |
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San Pedro de
Montes |
San Pedro de
Montes |
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Hacia 890, llegó a este lugar un tercer personaje: San
Genadio de Astorga, posiblemente atraído por el renombre
del lugar y de sus antiguos ocupantes. Genadio es el
restaurador de la vida monástica de San Pedro de Montes,
reedificando la iglesia y adaptando los espacios
abandonados a las nuevas necesidades. La comunidad
restaurada comenzó a recibir donaciones (el 892, del
obispo de Astorga), entre ellas la propia iglesia de San
Pedro, propiedad del obispado. La popularidad e
importancia del lugar fue creciendo e incluso Genadio
fue elegido obispo de Astorga (909-919). Es él quien
consagró la iglesia del monasterio, el 919, momento en
que le hizo una rica dotación. |
San Pedro de
Montes |
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A partir de este
momento la vida del monasterio sigue su ascensión, en todos los
sentidos, hasta convertirse en una gran abadía. En 1081 se introduce el
régimen cluniacense en San Pedro, todo hace pensar que hasta ese momento
todavía se regía por alguna regla de época visigótica (algo habitual en
algunos cenobios de la comarca). Esto provocó la oposición de parte de
la comunidad y su práctica escisión, con la coexistencia de dos abades,
situación que se prolongó hasta el 1099.
A mediados del siglo
XIII se construyó una nueva iglesia monástica, básicamente el actual. A
principios del siglo XIV el lugar pasaba por un período de decadencia y
perdió buena parte de sus bienes. En 1506 entró a formar parte de la
Congregación de Valladolid, no sin oposición, lo que ayudó a mantenerse
como abadía a pesar de su precaria situación. Ya en el siglo XVIII el
monasterio volvió a pasar por una época de bonanza, lo que le permitió
emprender obras de mejora en el monasterio. |
San Pedro de
Montes |
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En el siglo XIX, la
Guerra de la independencia, la desamortización y un incendio en 1842,
dejaron el lugar sin comunidad y en mal estado. Ahora es una iglesia
parroquial rodeada de las ruinas del monasterio y se han llevado a cabo
importantes obras de excavación y restauración. |
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