La
catedral de Calahorra forma parte de la diócesis de
Calahorra y La Calzada-Logroño. Su origen es muy
antiguo, y se relaciona con los
mártires Celedonio y
Emeterio que murieron martirizados alrededor del año 300
en este mismo lugar. Es sede episcopal desde el siglo IV.
El templo o baptisterio inicial quedó destruido por la
invasión islámica. La ciudad fue recuperada por García
Sánchez III de Pamplona.
Como en otras muchas diócesis, la de Calahorra tenía una
comunidad de clérigos en la catedral. Se sabe que cuando
García Sánchez III restauró la catedral el 1045 existía
ya una comunidad que la ocupaba. Inicialmente hacían
vida comunitaria, pero más adelante las costumbres se
relajaron y los canónigos podían adquirir sus propias
viviendas, ya sea por compra o por cesión por parte del
obispado.
El edificio actual se comenzó en levantar a partir de
1484.